La garantía propietaria es aún uno de los requisitos más comunes que se solicitan para alquilar un inmueble. Pero, alternativas como la fianza se suman a las opciones del mercado.
A partir del debate por la nueva ley nacional de alquileres -que finalmente perdió su estado parlamentario y no será aprobada este año en el Congreso- cobró fuerza el reclamo de inquilinos, propietarios y brokers por los requisitos a cumplir al momento de firmar un contrato de locación. Entre ellos, el aporte de una garantía propietaria suele ser es uno de los puntos de conflicto entre las partes.
Dado que para alquilar un inmueble no alcanza con demostrar un salario estable o un compromiso escrito de cumplir el contrato de locación hasta su término, en la mayoría de los casos el inquilino se ve obligado a presentar una garantía propietaria, a la que muchas veces resulta muy difícil acceder. Ésta no es otra cosa que un favor que un familiar o amigo le hace al inquilino para que este pueda cerrar su contrato de locación, aportando su propiedad como garantía para que el propietario y la inmobiliaria se aseguren del cumplimiento del contrato. Pero, cabe preguntarse si actualmente sigue siendo una herramienta eficiente para todas las partes.
El garante propietario no realiza una reserva de sus ingresos para afrontar eventuales incumplimientos, tampoco está preparado para pagar y nadie evalúa su capacidad de pago. En la mayoría de los casos, en cambio, si el inquilino no cumple lo más probable es que la disputa termine en juicio, proceso que puede tomar mucho tiempo hasta que las partes perjudicadas queden satisfechas.
"Si bien la garantía propietaria sigue siendo el sistema más comúnmente utilizado, también es el más ineficiente. En el presente aparecen alternativas como las garantías otorgadas mediante compañías de seguros y bancos o el sistema de fianzas. Las dos primeras opciones suelen acarrear mucha burocracia y poca efectividad a la hora de responder. La fianza, por su parte, aparece como una opción que va ganando terreno, beneficiando tanto a inquilinos como a propietarios e inmobiliarias", explican desde FINAER,, empresa que se dedica a este sistema desde hace más de siete años, brindando herramientas para resolver la obligación y la responsabilidad de garantizar correctamente al propietario un contrato de locación.
NOVEDAD
“Para los que aún no conocen el sistema de fianzas, podemos decir que se trata de una garantía que viene a sustituir a la antigua garantía propietaria. Los requisitos para obtenerla son muy simples y están al alcance de cualquier inquilino: la demostración de ingresos y el comportamiento crediticio”, resalta Oscar Lema, presidente de esta compañía. Esto se realiza a partir de la evaluación y calificación de los interesados en alquilar a partir de criterios financieros, mucho más amplios que los utilizados para la garantía propietaria.
"La garantía se gestiona de forma muy sencilla y rápida, completamente desde nuestra web, o bien a través de cualquiera de nuestras sucursales; también puede iniciarse a través del call center. Cada solicitud se resuelve en un máximo de 48 horas una vez completados los datos y la documentación de la solicitud”, informa Lema.
Para las inmobiliarias, la fianza también aparece como una alternativa de peso. Francisco Boccacci de Tizado Propiedades opina: “Los tiempos han cambiado y desde hace varios años llegaron nuevas maneras de garantizarle a un propietario los 24 meses de contrato, siendo nuestro deber informales bien de qué se trata esto y marcar la diferencia que hay con una garantía propietaria para que luego acepten y conozcan el sistema de garantía por fianza”.
Los beneficios del sistema de fianza radican también en el alcance de la cobertura, que en el caso de Finaer, por ejemplo, incluye al importe del alquiler, las expensas comunes, la tasa municipal, agua y todas las acciones legales y sus costos, para los casos de incumplimientos. La vigencia de la garantía se extiende hasta la restitución del inmueble. Con este sistema apunta a resolver el problema de inquilinos, "que buscan comodidades y no trabas a la hora de acceder a una vivienda", concluyeron.