Sólo el 10% de la tecnología se aplica al mercado inmobiliario

Francisco Altgelt, Vicepresidente de Altgelt Negocios Inmobiliarios ofrece un diagnóstico sobre el insuficiente uso de la tecnología en el sector inmobiliario y sus posibles causas.

En materia tecnológica, el mercado inmobiliario siempre estuvo atrasado. Existen varios casos que ejemplifican este problema estructural de nuestro sector.

A fines de los '90 empezaron a surgir en Argentina los sitios web. Recién hoy, casi 20 años después, prácticamente todas las inmobiliarias han desarrollado su presencia en la web, cuestión casi obligatoria en cualquier negocio actual. 

También, a principios de este siglo, la publicidad gráfica empezó a mutar hacia la digital. Si bien hoy ZonaProp es el principal portal inmobiliario de consultas, el volumen de clasificados de los diarios impresos se achicó recién en los últimos tres años. Este es otro indicio del atraso que lleva el sector con respecto al avance tecnológico.

Desde hace 10 años las redes sociales se convirtieron a nivel mundial en un nuevo canal de comunicación. Sin embargo, recién hoy las inmobiliarias están empezando a indagar este “nuevo mundo”.

A todo esto se suma que ya no se habla en el mundo digital del 2.0 sino del 3.0. ¡Qué lejos estamos!

Desde mi punto de vista, este retraso sucede por diversos motivos. En primer lugar, siempre el mercado inmobiliario fue muy tradicional y se buscó comunicar con ese estilo. Además, se quiere seguir midiendo la inversión comunicacional en términos de ventas, es decir, cuántos llamados voy a tener si publico en tal medio. Otro factor importante es que los grandes protagonistas de este rubro suelen ser personas de la era pre Internet y desconocen las virtudes de este canal.

Todo esto nos lleva a una conclusión: la tecnología está siendo tratada como un canal para comunicar o promocionar y no como un sistema de comunicación. Esto es un equívoco que hay que desterrar. Explotar estos nuevos recursos es un gran desafío. Como su crecimiento es exponencial, es importante que las inmobiliarias tomen a la tecnología como un sistema de trabajo. Ya no sirve con estar en Internet que es sólo el 10% de la aplicación de la tecnología al mercado.

Es necesario pensar en términos de una comunicación digital integral que abarque las redes sociales, los diferentes formatos que son necesarios (escrito, imagen, video), el feedback de la comunidad que generamos a través de estos canales y las oportunidades que nos brinda la publicidad digital. Tenemos un largo camino a recorrer pero que nos llevará, sin dudas, a una mayor actualización de nuestra profesión brindado un mejor servicio adaptado a las nuevas generaciones.